Pese a este aumento, señalan que este cultivo no es rentable.
Esta campaña se estima que la producción será un 25 por ciento menor por la escasez de lluvia en los últimos meses con unas cifras que rondan los 800 o 1.000 kilos por hectárea según declara, Antonio Monclova, técnico de Asaja Córdoba.
ANTONIO MONCLOVA – Asaja Córdoba
Desde Asaja señalan que la superficie de girasol «sigue reduciéndose año tras año con una bajada del tres por ciento en 2019», y en la campaña anterior se detectó una disminución del 15 por ciento de estos cultivos.
ANTONIO MONCLOVA – Asaja Córdoba
Aseguran que esta situación «pone en peligro la continuidad del cultivo por el bajo valor de los ingresos en la venta de la cosecha», que está por debajo de los costes de producción, según los datos de la Junta de Andalucía.
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