Las asociaciones que gestionan los comedores sociales son equipos de personas que trabajan para ayudar a crear nuevas oportunidades a las personas más vulnerables y a romper los círculos de exclusión

Pedro Martín (Asociación Resurrección) – Enrique Porras (Asociación NAIM)

Estos meses de alerta sanitaria han dejado tras de sí muchas imágenes difíciles de asimilar y todavía hoy siguen produciéndose situaciones complejas sobrevenidas por la paralización de actividades que antes de la pandemia formaban parte de nuestro día a día.

Pero lo más urgente es la atención a las personas que ya antes de esta crisis carecían de los recursos más básicos y las que se han visto por primera vez en la tesitura de pedir ayuda para sobrevivir. En este sentido, hoy planteamos la labor desinteresada que realizan las asociaciones y organizaciones sociales que ofrecen lo más esencial para la vida: la alimentación. Comedores sociales, economatos, ayudas,… hoy ponemos como ejemplo dos entidades andaluzas que no han dejado de trabajar para que nadie se quedara desamparado.

Hablamos con Pedro Martín Franco, trabajador social de la Asociación Resurrección de Punta Umbría, y con Enrique Porras, presidente de la Asociación NAIM.

Ayuda

Los comedores sociales continúan con su labor solidaria en beneficio de las personas más vulnerables pese a la crisis por coronavirus, que ha incrementado el número de usuarios que necesitan sus servicios. Según han explicado a los representantes de la Diputación, las asociaciones de estos comedores en la provincia de Huelva encabezan la iniciativa de crear una Red Andaluza de Comedores Sociales, con el objetivo de aunar esfuerzos en una sola voz y conseguir mayores recursos y medidas económicas, como poder solicitar las ayudas del IRPF al Gobierno de España. Esta Red Andaluza, que se encuentra en proceso de constitución, ya cuenta con la adhesión de las asociaciones de comedores sociales de Cádiz y Málaga.