Esta clausura definitiva no afectará a la localidad malagueña en su recogida diaria de residuos, ya que Marbella cuenta con una planta de tratamiento de residuos.
Desde 1998 el vertedero del municipio marbellí ha desarrollado un actividad contraria a la normativa ambiental y de sostenibilidad, y aunque el Ayuntamiento local lleva varios meses para dar solución a este problema, finalmente se ha optado por cerrar sus puertas en un plazo máximo de un mes.
El vertedero que no cuenta ni con la autorización ambiental necesaria ni con el permiso administrativo para el tratamiento de residuos ya ha provocado varios expedientes sancionadores por parte de la Junta de Andalucía a la localidad.
La normalización urbanística de los terrenos del vertedero se realizará mediante fondos europeos que rondaría los dos millones de euros.