Pasadas las dos y 20 de esta madrugada finalizaba en la basílica de la Macarena la exhumación de los restos del autor de estas horribles declaraciones: el general golpista Gonzalo Queipo de Llano. También se han sacado los restos del auditor de guerra Francisco Bohórquez Vecina, merced al requerimiento formulado por el Gobierno central a la hermandad en cumplimiento de la Ley estatal de Memoria Democrática, que prohíbe la presencia de restos de dirigentes del golpe de Estado de 1936 en lugares preeminentes de acceso público. En el momento en que salía el coche fúnebre se pudo escuchar un grito a la memoria y la justicia. Es la voz emocionada de Paqui Maqueda, activista por la memoria, cuya familia fue represaliada de múltiples maneras acudió de madrugada a la basílica de la Macarena. Esos que menciona son, de hecho, sus familiares.
Se pone así punto y final a una asignatura pendiente
Así define el alcalde de Sevilla la exhumación esta madrugada de los restos de Queipo de Llano y Francisco Bohórquez de la Basílica de la Macarena. Antonio Muñoz agradece a la Hermandad la celeridad con la que ha actuado y enfatiza que esta exhumación da tranquilidad al movimiento memorialista.
También se ha pronunciado el portavoz del Ejecutivo andaluz, Ramón Fernández Pacheco, que no ha entrado en valoraciones más allá de dar cumplimiento a la ley.
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